Debate creado el el 25/10/2009
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El que sabe no habla y el que habla no sabe. Qué
Escrito por María Del Carmen --- el 31/10/2009
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El que sabe no habla y el que habla no sabe.
Qué buen tema Gris. No es absolutamente cierto, Confucio siempre apela a la prudencia; pero mirad Sócrates, tartamudo y todo se las ingenió mediante el sistema de la piedra en la lengua para que en sus discursos no le jugara malas pasadas su tartamudez y poder expresarse con toda locuacidad y soltura. Su sistema de trabajo era la mayéutica, preguntar a diestro y siniestro lanzando preguntas para obtener respuestas. Ya he dicho en repetidas ocasiones que los conocimientos que poseemos los tenemos en usufructo, para que los comuniquemos a los demás. Yo se que el silencio también es música, pero, las cosas hay que decirlas; hay quien habla por hablar, frívolamente, por rellenar un hueco sin más; pero no es a eso a lo que me refiero. Cuando hay que hablar es necesario, pertinente, aconsejable, y tremendo error si no se hace, porque se puede estar induciendo a error, o se puede estar perjudicando a alguien con esa actitud. Por ahí hay un dicho según el cual cuanto más se habla más tonterías se dicen; pues eso quien sea tonto, quien no lo sea, siempre sus palabras irán cargadas con algún conocimiento, con algo que transmitir, incluso a veces, como somos instrumentos en manos de ese demiurgo universal, puede que ni siquiera seamos conscientes de que estamos transmitiendo algo que incluso puede ser importante. “Solo sé que no sé nada” es la humildad del que verdaderamente conoce, pero Sócrates no se pronunciaba en términos de limitación, sino todo lo contrario, una vez que se había dado cuenta de lo que conocía también se había dado cuenta de lo que le quedaba por conocer; y se empleó a fondo, trabajó, con su sistema y aportó a la humanidad, con su oratoria y su locuacidad una filosofía que constituye un sólido pilar donde se asentó el pensamiento posterior y trascendió la muerte física por medio de su obra. Evolucionó más que el resto y lo puso a disposición de los demás, que es de lo que se trata; con ello se trascendió también de forma espiritual. Pero las palabras no son más que un instrumento para transmitir, sentimientos, sensaciones, pensamientos, deseos…, a veces ni siquiera hacen falta, ahí actúa la interconexión electrónica, el pensamiento sin palabras que nos hace saber a unos de los otros sin hablar, sin ni siquiera estar presentes. En esto teníamos que animalizarnos, ellos conservan esta habilidad en estado puro, por ejemplo un perro, un gato un pájaro, no transmite conceptos, es su pensamiento el que se pronuncia, los ladridos y demás sonidos guturales se identifican mejor con estados de ánimos y voluntades, expresan alegría, tristeza, pena, voluntad de hacer algo…y se recurre a los gestos; los simios son capaces de comunicarse con nosotros y entre ellos con el lenguaje de signos. Así que no todo son las palabras. Pero sí que son necesarias entre nosotros, nos acercan, o nos separan; en un silencio puede haber sentimiento pero más usualmente se identificará con frialdad, distancia, incluso podría en algún momento indicar prepotencia. Los seres iguales ante el demiurgo universal han de expresarse como iguales, porque así solamente pueden optar a entenderse verdaderamente. |