Sí Karmina, el concepto LIBERTAD tiene muchas implicaciones, por supuesto que si se siente uno es muy feliz. Eso supone aceptación de uno del mundo y vivir en comunión perfecta con lo demás, sentirse en libertad completa es muy difícil, ir ganando porciones o ir sintiendo que se ganan esas porciones de libertad, enriquecen, hacen crecer y hacen feliz.
Aracelis tiene razón, está en ser autenticos, sinceros y hacer las cosas porque estemos comprometido con ello y porque otros las impongan de una forma u otra, imperativamente o sutilmente, con violencia psicológica o chantaje emocional. Proceder de esa forma es en realidad practicar la libertad.
Marta hace una valiosa aportación, hay que prescindir de los apegos, a veces el indivíduo puede sentirse incluso libre físicamente pero los apegos le tienen una soga al cuello; sin embaargo el invidíduo puede así incluso sentir su felicidad, porque se niega unas cosas, pero en función de otras, es una sublimación de unas cosas que se transforman en otras; a veces el individuo se impone a sí mismo como una especie de castigos, por faltas que cree haber cometido o estar cometiendo, y las expía de esta forma; incluso llega a sentir felicidad "por el deber cumplido". Muy de acuerdo contigo Marta: "... Desarrollarnos en mente y corazon,eso nos dara una vida plena,la felicidad... ".
Jesús, Santa Teresa también sintió la "Noche oscura del alma" y era felíz, como tu. La vida no es una línea recta. Quizás el equilibrio de la vida está en su desequilibrio, y la felicidad en la conquista y superación de unas cosas y la consecución de otras, la felicidad está de camino, no es una meta, que también lo es, pero...
Ramón, serenidad y experiencia se desprenden de tu concepción:" la Paz conmigo mismo". Ya lo creo que sí, si no tenemos eso, en realidad no tenemos nada,... Verdad...? ¡¡ .
Saludos. MCarmen